sábado, 21 de noviembre de 2009

DURRUTI: TAMBIEN EN LA MEMORIA



También moría un 20 de noviembre de 1936 Buenaventura Durruti. Lo hacía en extrañas circunstancias y víctima de un balazo en el pecho. Su muerte nunca ha sido esclarecida. La CNT, en la que militaba aunque con serias y graves discrepancias con sus dirigentes, simplemente dijo que había caído "victima de una bala fascista".

Durruti, leonés de nacimiento y universal de vocación, había abandonado la UGT socialista para afiliarse a la CNT a primeros de 1920, en Barcelona. Aquí conoció a Ascaso, García Oliver y Sanz, formando con ellos el grupo de "Los Solidarios" realizando atracos a bancos, asesinatos y otros delitos que justificaba en su lucha revolucionaria. Con el tiempo "Los Solidarios" se convirtieron el el grupo "Nosotros", con un contenido más ideológico aunque sin abandonar nunca la lucha armada y revolucionaria.

Iniciada la guerra civil, Durruti participa junto con sus camaradas en la represión de los alzistas en Barcelona, En los combates callejeros ve caer a su compañero y amigo Francisco Ascaso. Derrotado el alzamiento en Barcelona, Durruti convence al presidente Companys de la necesidad de generar un nuevo poder con el que hacer frente a la situación de guerra civil. De ese modo nace el Comité Central de Milicias Antifascistas de Catalunya que se convertirá en el auténtico poder en nuestra región. Ese Comité, formado por anarcosindicalistas, republicanos de ERC y marxistas, creará las checas y tutelará la represión de todos aquellos que se consideraron desafectos al régimen revolucionario republicano. Sin embargo Durruti no cree que haya que hacer la revolución hasta que no se gane la guerra a los alzados. Por ello decide marchar al frente, primero a Aragón y después a la capital de España. En el avance de su columna por tierras aragonesas, la represión de fascistas se acompañaba de colectivización. Fue una experiencia revolucionaria que no fraguó. El comunismo libertario, que es como se bautizó esa acción, abolía la propiedad privada de cada pueblo por dónde pasaba la Columna Durruti, se expropiaban las tierras a sus propietarios y se entregaban a los braceros. En su marcha Durruti no contó con el apoyo de las milicias comunistas ni del ejército de la República, que le vetaban la entrega de armas y municiones.

Ya en Madrid,  Aproximadamente a la una de la tarde del diecinueve de noviembre de 1936, en la calle Isaac Peral, Durruti es herido en el pecho por una bala de extraña procedencia; en grave estado, es llevado al Hotel Ritz, sede del hospital de las milicias catalanas, donde muere al día siguiente a las cuatro de la mañana. La autopsia reveló que el deceso de Durruti se debió a los destrozos causados por una bala calibre nueve largo, la cual penetró el tórax y lesionó importantes vísceras. Su cuerpo fue entregado a los servicios especializados del Municipio de Madrid para ser sometido a un proceso de embalsamamiento, ya que sería trasladado y enterrado en Barcelona. Su deceso es ocultado a la población con el fin de evitar desánimos.

La muerte de Durruti ocurrió en oscuras circunstancias que han propiciado la aparición de diversas hipótesis para explicar su deceso. Durruti defendía la misma postura del PCE de primeramente ganar la Guerra Civil, para posteriormente llevar a cabo la Revolución y dilucidar el modelo organizativo, pero teniendo bajo control el territorio. Ésta misma postura le enfrentó a la de su organización anarco-sindical CNT, que ya habían llevado a cabo en Cataluña la Revolución paralelamente a la Guerra Civil que discurría en Castilla. Según la CNT, escuetamente fue una «bala fascista». Las emisoras de radio de la zona nacional le atribuyeron el hecho a los comunistas, quienes a su vez aseguraron que el atentado había sido ocasionado por trotskistas o hasta por los mismos anarquistas debido al enfrentamiento de éste con su propia dirección. Se ha dicho también que fue víctima de unos ladrones, que él mismo intentaba detener. También se asegura que fue un disparo salido de su propia arma (a pesar de que las armas no se disparan solas): algunos afirman que se le cayó su fusil ametrallador, mientras que otros aseguran que Durruti sólo portaba un Colt 45.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Per pura qüestió d'imatge després de fer una entrada al blog d'homenatge al fundador de la Falange has hagut de fer un article similar sobre en Buenventura Durruti. Et convido a fer-ne un parell més sobre dos polítics morts (assassinats) també un 20-N: Santiago Brouard i Josu Muguruza.

Salutacions.

Anónimo dijo...

T'has acollonat? No tens collons per a mantenir el que dius? Estem farts d'haver de perdonar-vos la vida i conviure amb gentuza com tu. Sabem on vius, i amb qui. Carretera de... VISCA LA TERRA LLIURE!!!!

Javier Berzosa dijo...

Alguien ha cuestionado el que no publique algunos comentarios que me llegan acusándome de censor y antidemocrático por ello. Algunos de esos comentarios, amenazantes igual que los que me han dirigido a este post, fueron publicados pendiendo del post al que fueron dirigidos. No tengo por costumbre, y será la úlrtima vez que lo haga, publicar comentartios insultantes o amenazantes anónimos. El que quiera ver publicado su comentario, su amenaza o su insulto que tenga la valentía de dar la cara, de poner su nombre al insulto, a la amenaza o lo que sea. A Jordi, supongo que Martínez, espero que entiendas el porqué algunos "comentarios" no merecen ser publicados. Y quede claro también que yo no tengo que "largarme" a ningún pueblo porque soy nacido en Barcelona y por lo tanto un español de Catalunya, aun que algunos no puedan nunca entenderlo por su talibanismo irracional y sectario. Estoy en mi tierra y orgulloso de ella. De nouvingut no tengo nada.