A propuesta del Partido Popular, el Ayuntamiento de Alella congelará o, en caso de que el IPC sea negativo como consecuencia de la crisis económica, rebajará todos los impuestos y tasas municipales para el próximo año 2010.
La moción presentada por nosotros inicialmente contemplaba la rebaja del IBI para este mismo año destinando a ese fin un excedente de tesorería generado con la liquidación del presupuesto del pasado año 2008. Una vez suprimida esta petición, CiU se adhirió al resto de la propuesta que consistía en congelar los impuestos y tasas para el próximo año y, en csaso de persistir la crisis, aplicar el IPC negativo con el objetivo de rebajar la presión fiscal de nuestros vecinos para ayudarles a afrontar la crisis. Por parte del Alcalde se nos propuso la retirada de la moción con el compromiso de convocar una Comisión Informativa extraordinaria el próximo mes de julio cuyo objeto fuera estudiar las ordenanzas fiscales y valorar la posibilidad de hacer ajustes en los impuestos. Aprovechando esa petición pero sin renunciar a nuestra moción, le propusimos al Alcalde que votara a favor de nuestra propuesta demostrando así a los vecinos esa voluntad de adoptar medidas que ayudaran a afrontar la crisis. Con el voto a favor de ERC-LG, el resto de grupos no quisieron quedarse huérfanos ante la aprobación de la propuesta económica más importante tomada por un Pleno en nuestro ayuntamiento y con una afectación tan directa en la economía de nuestros vecinos.
Esto es hacer política pensando en Alella. Esto es ofrecer soluciones. Las mociones de alcaldes de Hiroshima o Nagasaki que presentan grupos como Gent d'Alella, o las que pretenden que Coca-Cola etiquete sus refrescos en catalán poco tienen que ver con los problemas de nuestros vecinos.
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